Para leer Cuento amarillo, hay que seguir el consejo de la muchacha del vestido rojo con pequeñas flores negras de "Ácido": "Vete con cuidado, Adriana Conde". Y tiene razón, porque no hay asidero lógico, ni tierra firme dónde pisar. Su lectura nos sumerge en un mundo en el que fl...
“Conmigo a solas me convierto: en una habitación llena de gente” dice la voz que recorre Idio(s), de Christophe Manon, esquizoide a veces; frenética, descolocada, otras tantas; profética, otras más. Parece anunciar un mundo cuyo advenimiento se confunde a tal grado con su declive...
Pedazos de mi´ mismo es una introspeccio´n desgarradora. Un ejercicio lu´dico e iro´nico que pone a prueba la pericia del lector. Las confesiones se vuelven dagas de doble filo. Cada esquirla encierra ma´s de una trampa, ma´s de un abismo. Ri- cardo Sevilla, maestro del sarcasmo,...
No son pocos los escollos que acechan a la escritura breve: la vaguedad, el sinsentido, la bagatela, el disparate, la mera ocurrencia. Sortear estos abismos requiere una inteligencia y una sensibilidad capaces de encapsular, en la mínima extensión posible, la acción y la palabra....